El jengibre, esa raíz a la que se le atribuyen tantos beneficios para tu salud, como reducir la inflamación, aliviar las náuseas o reducir los síntomas menstruales, se ha utilizado en la cocina y la medicina desde la antigüedad. La raíz procede de la planta Zingiber officinale y se utiliza en la medicina china e india desde hace miles de años.
Para aprovechar todos los beneficios del jengibre se suele utilizar fresco o seco en diferentes elaboraciones culinarias o en infusiones. La parte del jengibre que más se usa es el rizoma, que es como la parte de la raíz que está bajo tierra. Es un ingrediente común en muchas recetas, ¡y hasta en remedios caseros y productos de belleza!
En este artículo, te contamos todos sus beneficios y te damos algunas ideas para que empieces a usarlo más en tu cocina.
Beneficios probados del jengibre
El jengibre contiene gingerol, un componente activo que tiene propiedades antiinflamatorias, antibacterianas y antivirales. A continuación, se indican algunos de los posibles beneficios que puede aportar esta planta.
Puede aliviar las náuseas y los vómitos
Se cree que el jengibre puede ayudar con las náuseas, incluidas las del embarazo y las de después de una operación. Aunque claro, siempre es bueno hablar con el médico, sobre todo si estás esperando un bebé.
Una revisión de 2020 indica que el jengibre puede ayudar a aliviar las náuseas matutinas y aliviar las náuseas después del tratamiento del cáncer.
Reduce los gases y mejora la digestión
Son varios los estudios que han investigado los efectos del jengibre sobre los gases que se forman en el tracto intestinal durante la digestión. Esta investigación indica que las enzimas en el jengibre pueden ayudar a romper y expulsar este gas, lo que proporciona alivio de cualquier malestar.
Además, la investigación muestra que el jengibre puede ayudar a aumentar el movimiento a través del tracto digestivo, lo que sugiere que puede aliviar o prevenir el estreñimiento.
Refuerza el sistema inmunitario
El jengibre se utiliza a menudo para recuperarse de un resfriado o de la gripe. Un estudio de 2017 sugirió que el consumo diario de jengibre puede contribuir a mejorar el sistema inmunológico. Esto puede proteger contra enfermedades crónicas y apoyar la recuperación de otras enfermedades, como el resfriado común o la gripe.
Sin embargo, para confirmar los efectos del jengibre sobre el sistema inmunitario se requiere más investigación.
Reduce la inflamación
Si sufres de osteoartritis, el jengibre podría darte un poco de alivio. Algunas investigaciones sugieren que puede reducir el dolor en las articulaciones.
Una investigación de 2015 concluyó que tomar jengibre por vía oral es eficaz y seguro para tratar la inflamación causada por la osteoartritis. Sin embargo, los autores señalaron que los estudios eran pequeños y podrían no representar a la población general.
Alivia los dolores menstruales
Si estás lidiando con dolores menstruales, ¡el jengibre podría ser su solución! Algunas investigaciones sugieren que puede aliviar esos dolores. Esta raíz podría reducir el dolor gracias a los efectos antiinflamatorios y analgésicos de sus compuestos de gingerol.
Un estudio de 2016 concluyó que el jengibre puede ayudar específicamente a reducir la dismenorrea, es decir, el dolor justo antes o durante la menstruación.
¿Cómo se utiliza el jengibre en la cocina?
Ahora que ya conoces todos los beneficios del jengibre para la salud, añádelo a tus platos para dale un toque de sabor único e intenso. Aquí te mostramos algunas ideas para incorporar el jengibre en tus recetas:
Aderezo para ensaladas:
Mezcla jengibre rallado con aceite de oliva, vinagre de arroz, miel y un toque de salsa de soja para crear un aderezo fresco y aromático que realzará tus ensaladas.
Marinadas para carnes y pescados:
Combina jengibre rallado con ajo, salsa de soja, miel y jugo de limón o lima para crear una marinada deliciosa y llena de sabor para carnes y pescados. Déjalos reposar durante unas horas o toda la noche para que absorban todos esos sabores.
Sopas y guisos:
Agrega rodajas de jengibre fresco a tus sopas y guisos para darles un toque de frescura y calidez. El jengibre combina bien con sabores asiáticos y orientales, como el cilantro, el ajo y la salsa de pescado.
Bebidas refrescantes:
Exprime un poco de jugo de jengibre fresco en tus bebidas favoritas, ya sea agua con limón, limonada, batidos saludables, té helado o incluso cócteles. El jengibre añadirá un toque picante y refrescante que te encantará.
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Postres:
¿Quién dice que el jengibre solo se usa en platos salados? Agrega jengibre en polvo o jengibre fresco rallado a tus recetas de postres favoritas, como galletas, bizcochos o incluso helados, para un toque de sabor inesperado y refrescante.
Infusiones reconfortantes:
Prepara una infusión caliente con rodajas de jengibre fresco, rodajas de limón y un poco de miel para un remedio casero perfecto para los días fríos o para cuando estés con las defensas bajas.
Cómo preparar una infusión de jengibre
Tomar una infusión de jengibre durante los meses fríos es una idea estupenda. Puedes añadir un poco de limón o lima y un chorrito de miel para que te resulte más llevadero, pues el intenso sabor del jengibre no es del agrado de todo el mundo.
Puedes comprar bolsitas de té de jengibre que contienen jengibre seco, a veces en combinación con otros ingredientes. Estas bolsitas se conservan bien y son cómodas de preparar.
La infusión de raíz de jengibre con jengibre fresco requiere un poco más de preparación, pero suele tener un sabor más intenso y vivo.
Es muy fácil:
- Compra un trozo de jengibre fresco.
- Recorta los extremos secos.
- Pélalo con cuidado.
- Córtalo en rodajas finas transversales.
- Pon unas cuantas rodajas en una taza.
- Vierte agua hirviendo y tápala.
- Para aprovechar todas las propiedades del jengibre, deja reposar las rodajas al menos 10 minutos.
¿Es mejor la raíz de jengibre o el jengibre en polvo?
Ambas formas contienen todos los beneficios del jengibre para la salud. Aunque es difícil superar el sabor de la raíz fresca, el jengibre en polvo es nutritivo, práctico y económico.
El jengibre fresco dura un tiempo en el frigorífico y se puede congelar después de haberlo pelado y troceado. El polvo tiene una larga vida útil y está listo para usar, no tienes que pelarlo ni trocearlo.
Así que ya lo sabes, el jengibre es un superalimento con muchos usos en la cocina. No dudes en incluirlo en tus comidas y bebidas para disfrutar de todos estos increíbles beneficios para la salud.
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